Etiquetas

lunes, 2 de agosto de 2010

Lejanías

Sucede que muchas veces aprendo acerca de lo esencial cuando tu ausencia, y todo lo que ella suspende, te añora.
Tu cuerpo en la oscuridad y el perfil de luz dibujado en la pared, fugaz milagro de quietud después de que todo se nos arremolina…
El aire que te toca y el que no te hace falta, el que acaricia mi espalda junto a tus manos apresurada, adormecida, o casi imperceptiblemente…
Tus latidos en los míos, el motor de cada vibración mutua…
Tu voz, tus preguntas, tus respuestas, tu risa detenida en mis oídos, todos los sonidos…
Tu sueño, tu desvelo… tus ojos en los míos cuando despierto, tus ojos en mis sueños cuando duermo ovillada en los tuyos…
Tus paisajes, tus formas, tus colores, tus texturas… Todo lo que te compone y lo que te desarma, lo que te dispone, lo que te gusta o no… lo que me asombra, lo que adivino, lo que sé, lo que no sé… tus manifiestos y tus misterios…
Todo, todo eso y más me vuelve extraña cuando se confina en mis palabras.

Analuz, 30 de enero de 2010